Las lavanderías autoservicio, tan típicas de las series televisivas pero a las que estamos poco acostumbrados en España es un sector en expansión. Debido a los cambios en el estilo de vida de los españoles a causa de los cambios en la economía y a la diversificación de los modelos de familias son muchas las personas que viven solas, con un ritmo de vida rápido, fuera de casa, en pisos reducidos o con una economía que no permite hacerse con una lavadora. También es posible que aunque la economía y el espacio lo permitan, necesitemos tener también una secadora porque en nuestra vivienda no hay espacio para tender la ropa al aire libre. Los motivos son múltiples.
Las lavanderías autoservicio Wash-up ofrecen un servicio de lavandería de calidad express, que cuida la ropa y la tiene lista en 30 minutos.
Esta franquicia dispone de lavadoras de todos los tamaños, para que el usuario pueda lavar prendas de gran tamaño, con puertas amplias y apertura total (180º).Las máquinas están instaladas sobre base de acero inoxidable, que favorece la limpieza de las unidades y el aspecto impecable que muestran los establecimientos.
Además, las máquinas están colocadas en altura, de manera que el usuario no tiene que agacharse para para cargar y descargar la ropa o manejar el panel de control.
Si estamos pensando en apuntarnos al negocio de las franquicias, Wash-up es una de las opciones más recomendables, especialmente si queremos hacerlo en una ciudad con gran actividad económica, donde sus habitantes cumplan con el perfil de necesidad y exigencia para el que va destinado esta marca.